圣地亚哥的早晨,笼罩着白色和灰色的云雾,像包裹在棉絮之中。人们全都望弥撒去了,花园中只留下了麻雀、小银和我。
在偶然洒下点滴细雨的团团云层下面,有多少麻雀呀!看它们怎样在藤蔓之间钻进钻出,相互啄弄着小嘴,吱吱喳喳地吵闹!这一只落在树枝上又飞走了,留下了颤动的树枝;那一只飞下来在井圈小水坑的蓝天中喝上一口;另外一只落在披屋的小瓦顶上,那儿满是凋萎的花朵,棕灰的天色使瓦顶的色彩更加鲜明。
没有固定节日的幸福的鸟儿!它们有着真正天赋的纯真和自由,钟声对它们来说没有任何意义;它们有的是悠闲的欢乐。多么快乐啊,它们不象那些可怜的颤颤兢兢的人们;它们没有一定的负担,没有天堂的欣喜,也没有地狱的恐惧;它们有自己的道德;它们的上帝就是蓝色的天空;它们是我的兄弟,我的多么温顺的兄弟。
它们旅行,不需要钱也不需要带行李!任何时候,只要它们愿意,就可以搬家,觉得哪里有一条小河或者有一丛绿叶,只要需要,它们一展开双翅就能得到它们的幸福。它们不需要知道哪天是星期一,也不需要知道哪天是星期六。它们在任何地方,在任何时候,都可以沐浴洗澡。它们爱它们的没有名字的爱人,它们的爱遍布全球。
那些可怜的人!当他们每个星期天关起大门去望弥撒的时候,它们忽然带着青春活泼的喧闹来到这家关闭着大门的花园之中。它们是没有仪式的爱情和欢乐的榜样;那里有它们非常熟悉的那么一个诗人和那么一头温和的小驴——你跟我们一起来吗?——正在友爱地望着它们。
LXIII
GORRIONES
La mañana de Santiago está nublada de blanco y gris, como guardada en algodón. Todos se han ido a misa. Nos hemos quedado en el jardín los gorriones, Platero y yo.
¡Los gorriones! Bajo las redondas nubes, que, a veces, llueven unas gotas finas, ¡cómo entran y salen en la enredadera, cómo chillan, cómo se cogen de los picos! Este cae sobre una rama, se va y la deja temblando; el otro se bebe un poquito de cielo en un charquillo del brocal del pozo; aquél ha saltado al tejadillo del alpende, lleno de flores casi secas, que el día pardo aviva.
¡Benditos pájaros, sin fiesta fija! Con la libre monotonía de lo nativo, de lo verdadero, nada, a no ser una dicha vaga, les dicen a ellos las campanas. Contentos, sin fatales obligaciones, sin esos olimpos ni esos avernos que extasían o que amedrentan a los pobres hombres esclavos, sin más moral que la suya ni más Dios que lo azul, son mis hermanos, mis dulces hermanos.
Viajan sin dinero y sin maletas; mudan de casa cuando se les antoja; presumen un arroyo, presienten una fronda, y sólo tienen que abrir sus alas para conseguir la felicidad; no saben de lunes ni de sábado; se bañan en todas partes, a cada momento; aman el amor sin nombre, la amada universal.
Y cuando las gentes, ¡las pobres gentes!, se van a misa los domingos, cerrando las puertas, ellos, en un alegre ejemplo de amor sin rito, se vienen de pronto, con su algarabía fresca y jovial, al jardín de las casas cerradas, en las que algún poeta, que ya conocen bien, y algún burrillo tierno -¿te juntas conmigo?- los contemplan, fraternales.